
Quién no ha escuchado alguna vez aquella frase de: “como solía decir mi abuelo…” o quizá una recomendación de “mi abuela dice que esto es bendito para la gripa”… Y es que, la palabra de abuelo es palabra sagrada en las familias, pues representa el significado puro de amor y sabiduría, dos cualidades que cuando están juntas, hacen de la figura del abuelo una esencial en las familias de antes, de hoy y de siempre. Quédate en este artículo para conocer el rol del abuelo, cómo aprovechar al máximo su compañía y cómo esta se complementa con otros roles familiares.
¿Cuáles son los roles que podemos desempeñar?
Así suene como un trabajo pago, hablamos del “rol del abuelo” porque precisamente todos durante nuestras vidas cumplimos diferentes roles en los círculos sociales; roles que tienen como remuneración el amor y las horas extras pasan desapercibidas porque se cumplen en tiempo completo. Podemos ser padres, hijos, hermanos, amigos, vecinos… Si lo pensamos a profundidad, siempre llevamos al lado de nuestro nombre, innumerables roles.
Los abuelos como pilares de la familia
Ahora bien, si sabemos que los roles durante nuestra existencia son muchos y quizá de igual importancia, existen algunos que vienen cargados con mayores responsabilidades. Es el caso, por ejemplo, del rol del abuelo, quien según la etapa en la que se encuentre, puede ser un apoyo para los padres en la crianza de sus hijos, o también, ser esa voz experta en la carrera de la vida, que da consejos y une a la familia en torno a su presencia y amor.
¿Por qué es importante el rol de los abuelos en la crianza de los nietos?
Los abuelos por su edad adulta y los niños, por sus primeros años de vida, crean lazos que enseñan a ambos, otras perspectivas que no tienen o que posiblemente han perdido. Los abuelos, gracias a sus nietos, vuelven a ver el mundo con ojos de curiosos, creativos e imaginan con ellos mundos nuevos en la medida en que le ayudan a sus nietos a inventarlos, mientras que viceversa, estos aprenden de empatía con el adulto mayor, paciencia e incondicionalidad.
En muchas familias, el rol del abuelo está ligado a un acompañamiento pleno, desde que el nieto se encuentra en sus primeros meses de vida hasta la adultez, generando un vínculo genuino entre ellos… De ahí que esta relación sea el motivo de reuniones familiares o encuentros cada vez más frecuentes. Exploremos un poco más sobre lo que se aportan unos a otros:
Apoyo emocional
Desde la psicología, el apoyo emocional que juega el rol del abuelo nos habla de empatía, compromiso, gratitud, entre otros. Sin embargo, la vida nos ha ayudado a comprender que la sabiduría sí viene con los años, y afortunados somos cuando, ante un problema o alguna situación que nos genera dudas, como el dolor, el amor o las metas en la vida, tenemos el placer de sentarnos a escuchar los consejos de nuestros abuelos que, no solo ya pasaron por aquello que nos inquieta, sino que pareciese que llevaran en su piel, una intuición que pocas veces se equivoca respecto a lo que debemos hacer.
Valores que aprendemos con el rol del abuelo
Pero claro, la relación con los abuelos, como cualquier otra relación, siendo justa, es de doble vía, en donde ambas partes tienen mucho que ganar, para el corazón y para la vida. Veamos los principales beneficios de esta:
Empatía
La empatía o también llamada la habilidad para “ponernos en los zapatos del otro”, se adquiere con los años y también con los daños que nos causan o que causamos a otros. Sin embargo, cuando miramos la empatía en el sentido de abuelos a nietos o viceversa, a ambos les regala la capacidad para, desde el amor, entender que ven el mundo desde sus propias realidades, las cuales son tan válidas como diversas. Esto aplica también para las relaciones que competen al rol del abuelo con sus hijos, hermanos o cuidadores.
Gratitud
Aquellos que son conscientes del presente, sabrán muy bien que hay compañías que no se repiten dos veces en la vida, y es que así sonemos como a “carreta ya dicha”, amigos muchos, pero abuelos solo unos, así que, entender con empatía, lo valioso de su presencia en la familia es ir un paso más adelante con la gratitud de mirar todo en la vida.
Paciencia
Esta relación, como ya te lo dijimos, tiene también sus retos naturales, entre los cuales juegan un papel importante los factores de la edad. Es el caso puntual de los cambios que llegan en la edad adulta con la incontinencia, por ejemplo, en donde los abuelos activos pueden manejarla por sí solos, y otros requieren de alguien más para su cuidado. En ambos casos, la paciencia, los valores que hemos venido explorando y los productos adecuados como Pants, Pañales o demás, serán clave para hacer de la rutina una mucho más sencilla.




¿Con qué frecuencia los nietos deben visitar a sus abuelos?
Responder a esta pregunta sería un mal intento de entrar en tu corazón, pues el único que con sensatez sabrá esta respuesta eres tú y dependerá de la experiencia, cercanía o historia que tengas con tu abuelo. No obstante, no está de más decirte que nunca es tarde para construir una relación más cercana con ellos, si así lo quieres. Recuerda que por su edad, naturalmente valorarán más los pequeños detalles como una buena conversación, o incluso podrán verse un tanto más exigentes ante sus demandas de compañía.

¿Se debe poner límites a los abuelos?
Sabemos que puede no gustarte mucho esta respuesta, pero es un gran: “depende”. Si no eres directamente el responsable de su cuidado, te será fácil hablar con él respecto al tiempo que puedes compartir a su lado o los detalles que le brindes. Si tu caso es de cuidador, seguramente sí deberás tener conversaciones importantes respecto a tu descanso, tus temas personales u otros. Esta tarea puede requerir de ayuda profesional según el estado de salud del abuelo, si es tu caso, ¡no dudes en pedirla!
Con esta mirada general al rol del abuelo, tenemos la certeza de valorar cada vez más su compañía. Si no eres cercano en este momento a él, pregúntate qué puedes aportarle, en el mismo modo de lo que él pueda enseñarte; los vínculos familiares son esa primer red de apoyo que tenemos ante la vida misa y son tan valiosos como queramos verlos, por ello, con foco en lo importante, empieza por conversar con ellos y verás como fácilmente vuelves a lo esencial.
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