Cuando adentro todo está bien, afuera la vida es más color pastel ¡Pero para lograrlo deberás interiorizarlo! ¿Cómo? Tan sencillo como adentrarte al mundo Mindfulness y conocer el poder de esta práctica en tus actividades diarias, pensamientos y las diferentes formas en que percibes todo aquello que habita a tu alrededor. Un estilo de vida para autoconocerte, cuestionarte y guiarte hacia la toma consciente de decisiones.
Llevar el Mindfulness a la cotidianidad es aprender a desarrollar conscientemente cada uno de tus cinco sentidos con el objetivo de explorar(te) y conseguir focalizar tu atención hacia el aquí y el ahora. Es por esto, que el cerebro juega un papel súper importante en su práctica, al tiempo en el que la capacidad cognitiva se ve constantemente retribuida y beneficiada.
¿Qué pasa cuando estimulamos el cerebro?
De seguro en algún momento te has puesto a pensar que, al tener tu mente ocupada, con trabajos, tareas, requerimientos u otras distracciones, estás asegurando un cerebro sano, activo y en constante evolución ¡He aquí el error! La clave no está en la cantidad de información que recopilas diariamente, sino en la forma en la que procesas la misma. Y esto es lo que logras con la práctica del Mindfulness.
Hay mil maneras de estimular el cerebro, que van desde aprender una canción, hasta llenar un crucigrama o leer un libro; incluso, cuando sales a dar un paseo, observar y pensar ¡También lo estás haciendo! ¿Y qué es lo que pasa en ese momento?
Mejora tu memoria y las conexiones neuronales, lo cual fortalece la actividad cerebral y, por ende, previene enfermedades degenerativas como el Alzheimer.
Cambia tu estado de ánimo, la clave para contrarrestar los episodios de ansiedad y depresión.
Tendrás nuevas visiones y percepciones sobre la vida; hechos, situaciones, personas, lugares, etc.
Fortalecerás los procesos de aprendizaje, siendo más fáciles de reconocer y adaptar en tu rutina.
Dicen que una persona curiosa no se aburre nunca ¡Cuánta razón! Estimulando tu cerebro tendrás la posibilidad de cuestionarte todos los días y de aprender cosas nuevas.
¡Pero esto no es todo! Ve por tus anteojos, toma asiento y lee con atención. Ahora que sabes la relación que existe entre Mindfulness y cerebro, queremos contarte a detalle sus principales beneficios en los adultos mayores que lo practican.
¿Por qué practicar Mindfulness en la tercera edad?
Nunca será tarde para darle un significado a tu vida, cambiar la perspectiva, alimentar tu ser y conectar con tu yo interior.
¿Sabías que el 95% de los pensamientos que se recrean a lo largo del día difieren a circunstancias negativas? Cuando hablamos de Mindfulness y cerebro, tenemos la tarea de transformar el presente para lograr aprovecharlo, disfrutarlo y sentirlo al máximo. Por esta razón, es en la edad adulta donde se requiere de una mayor atención para lograr aterrizar en tal estado de plenitud ¡Te contamos por qué!
El sentimiento de soledad desaparecerá con el tiempo
La soledad, al igual que la depresión, es uno de los principales causantes del deterioro tanto físico como mental. Cuando hay un sentimiento de soledad habitando en el interior de un adulto mayor, habrá un alto riesgo para él de contraer enfermedades cardiovasculares y neurodegenerativas, además de desbloquear otras emociones negativas como la tristeza y la frustración. Es por esto, que adaptando una rutina de Mindfulness se puede lograr combatir este sentimiento, aceptándose desde la gratitud y aprendiendo a convivir con él.
Recuerda la importancia de la salud mental para vivir sin pensamientos intrusivos o que pongan en desbalance tus emociones.
Llévate mejor con el sueño y disfruta placenteramente la noche
Tener una noche tranquila y placentera es quizá para el adulto mayor uno de sus rituales más importantes, ya que garantiza la energía del día y aumenta la claridad mental al desarrollar cada una de sus rutinas. El Mindfulness te permitirá relajar la mente y el cuerpo antes de ir a la cama, y hará que el tiempo de descanso se sienta realmente reparador.
Una de las mejores formas para trabajar Mindfulness y cerebro antes de ir a dormir es trayendo a tu mente una idea, imagen o pensamiento que te haga sentir feliz. Incluso escuchar a detalle, interiorizar cada fragmento o percibir los instrumentos detrás de una canción que te guste ¡Será demasiado enriquecedor!
Tratamiento efectivo para el dolor crónico
Se ha comprobado que las personas mayores que adaptan una rutina Mindfulness en su estilo de vida durante un tiempo prolongado podrán disminuir los síntomas relacionados con el dolor crónico. Además, sabemos que esta práctica mejora los niveles de estrés, lo que permite tener una actitud más flexible frente a las molestias físicas.
Eres demasiado afortunado por haber llegado hasta aquí. Si en este momento estás pensando en adentrarte cuanto antes al mundo Mindfulness, significa que vamos por buen camino y que las siguientes recomendaciones en definitiva ¡Son para ti!
Ejercicios Mindfulness prácticos para despertar el cerebro
¡Agarra lápiz y papel! Dirígete a un lugar tranquilo ya sea dentro o fuera de tu casa. El objetivo de esta actividad es agradecer, así que realizarás una lista con cinco cosas, tres habilidades, tres experiencias y dos personas por las cuales te sientas agradecido por tener en tu vida.
¡Pon tu alarma y despiértate al amanecer! Aquí pondrás a prueba tu habilidad para identificar los sonidos y conectar con cada uno de ellos. Puedes hacerlo desde tu habitación o intentarlo desde el balcón de tu casa. Toma asiento, cierra los ojos y deléitate con el sonido del despertar, el viento, los pájaros, el silencio; la magia está en perderte dentro de ellos.
Esta misma dinámica la puedes llevar a cabo en una zona verde, un jardín o un campo alejado en el que logres acoplarte con la naturaleza.
¡Ritual de desayuno! Si deseas, lo podrás llevar a cabo en las tres comidas del día. El objetivo está en desconectarte de toda distracción sonora o tecnológica para concentrarte en tu alimentación. Un momento de intimidad contigo mismo y el plato frente a ti. Enfócate en el instante y déjate llevar por tus sentidos: pon a prueba colores, olores, sabores y texturas.
Por último, y una de las prácticas más importantes: ¡la respiración! Hazlo sentado, preferiblemente, con una postura recta que permita una inhalación y exhalación más efectiva. Concéntrate en cómo el aire entra y llega hasta tus pulmones. Conecta con cada parte de tu cuerpo, deja fluir las sensaciones y evita en la transición pensamientos negativos o juicios innecesarios; de lo contrario, vuelve a comenzar.
Sin duda alguna, la combinación Mindfulness y cerebro es todo lo que necesitas para sentirte verdaderamente orgulloso de estar vivo ¡Anímate!
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